Nuestro programa de cocina saludable
Todos los ciclos de Currusquinos Montessori tienen la posibilidad de unirse al programa de alimentación saludable en la escuela, creado por nuestra cocinera Beatriz García de Albéniz, en colaboración con el equipo directivo de Currusquinos Montessori, y supervisado por una nutricionista.
Nuestra misión es acercar la alimentación saludable a la escuela, dándole el valor que se merece.
Hemos creado un menú equilibrado con variedad de sabores, texturas y colores utilizando productos ecológicos de temporada y de cercanía, aprovechando la gran riqueza gastronómica que nos ofrece nuestra tierra y demostrando que comer rico y saludable desde la infancia, es posible.
Nuestro objetivo
Concienciar a las familias, a los niños y a las niñas de la importancia de seguir una alimentación sostenible y equilibrada.
La elección de la materia prima es muy importante, aprovechamos los recursos que nos ofrece nuestra naturaleza y que tenemos más al alcance, para que no sólo sea una alimentación saludable, sino comprometida con nuestro medio ambiente.
Esto es lo que hacemos
Los niños, en función de su edad, colaboran con nuestra cocinera en la elaboración de los menús.
Con los más pequeños, se introduce la alimentación complementaria a través del BLW, mediante trozos que los bebés pueden agarrar, consiguiendo ser autónomos en su alimentación, probar texturas nuevas, colores, sabores, etc.
Periódicamente, ofertamos charlas de alimentación para las familias, así como recomendaciones de menús para la cena, acordes a los menús del centro, para que la alimentación de los niños y niñas sea lo más equilibrada y saludable a lo largo del día.
Trabajamos de manera transversal
• Gracia y cortesía
• Motricidad fina
• Manipulación, interiorización de conceptos, trabajando los sentidos y refinando movimientos
• Conceptos matemáticos, cantidades, dimensiones, números, tiempo…
• Aparece la ciencia, experimentando reacciones que tienen los alimentos
• Ampliamos vocabulario específico a través de tarjetas de nomenclatura y en tres partes (comunicación entre cocina y guías)
• Cocinamos, no hacemos juego simbólico (vida práctica)
• Trabajamos orden y limpieza (cuidado del ambiente)
• Estar en contacto con alimentos nos hace más conscientes de la jerarquía botánica y la naturaleza